¡Vamos a jugar!

Por María Piedad Martínez Ocádiz/Guardianes

Abril, mes de la niña y el niño. Nos gusta festejarlos, divertirnos y jugar con ellas y con ellos. Pero, atención guardianes, aunque parezca que solo es un juego, hay que tomarlo en serio, pues jugar no solo afianza el vínculo entre infantes y adultos, también tiene múltiples beneficios para las niñas y los niños.

Les permite un sano desarrollo de su cuerpo, sobre todo con el juego locomotor, es decir, los juegos donde hay movimientos de músculos como rodar una pelota, correr o saltar. Así ejercitan sus músculos, adquieren dominio de su cuerpo y coordinan la visión con el movimiento.

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A través de algunos juegos se crean los cimientos para el entendimiento de conceptos matemáticos, habilidades de negociación y solución de conflictos. Juegos como apilar bloques de distintos tamaños, construir castillos de arena o túneles en la playa.

Por medio de su imaginación descubren formas flexibles para usar objetos, por ejemplo, pueden convertir una botella en un cohete o ser una maestra, un bombero, una bailarina, un policía, o varias profesiones a la vez.

El juego enseña a niñas y niños a interactuar con los demás y a cooperar, ya sea con sus pares, niñas o niños menores o con personas mayores, en un ambiente placentero. Ríen, corren, discuten, crean y se divierten con sus compañeras y compañeros de juego.

Por todo lo anterior las niñas y los niños necesitan jugar, no pensemos que es un tiempo perdido, al contrario, el tiempo de juego es un tiempo bien invertido que les ayuda a crecer adecuadamente y a madurar.

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