Deja atrás los mitos: Claves para una maternidad feliz y sin burnout

La maternidad es una experiencia transformadora y enriquecedora; sin embargo, también puede ser abrumadora si permitimos que las expectativas sociales y los mitos influyan en cómo la vivimos. Debes saber que una maternidad feliz es posible cuando aprendemos a priorizar lo que realmente importa y dejamos atrás las presiones externas o las expectativas irreales en torno a ser madres.

En esta nota te hablamos sobre la importancia de cuidar tu bienestar físico y, sobre todo, tu bienestar emocional, pues este puede ser un desencadenante en la aparición del burnout materno, un síndrome que afecta a muchas mamás en el mundo.

Maternidad feliz sin burnout materno

La maternidad está llena de momentos únicos e irrepetibles. Desde la primera sonrisa de tu bebé hasta esos abrazos espontáneos que te derriten el corazón. Cada día trae consigo pequeñas alegrías que hacen que todo valga la pena. Pero más allá de los hitos tradicionales, lo más bonito de la maternidad es la oportunidad de crecer junto a tu hijo o hija, aprendiendo a ser más paciente, más resiliente y, sobre todo, a valorar las pequeñas cosas de la vida.

En entrevista, la psicóloga Diana Alvarez, especialista en el tema del burnout materno, nos platicó acerca de cómo, a veces, muchas mujeres cargan con expectativas irreales o con la idealización de la maternidad:

“La realidad de la maternidad no es así, es un trabajo que genera estrés y que involucra hacer muchas cosas que parecen invisibles pero que son un gran peso sobre los hombros”.

Respecto a esto, la experta refiere que, en nuestra sociedad, se tienden a tener ideas equivocadas acerca de lo que es “ser una buena madre” como por ejemplo:

• “Una buena madre es la que se sacrifica”.
• “Soporta todo hasta el final”.
• “Pone por encima a los hijos y la familia, no importan lo que este sucediendo con ella, ya sea a nivel físico, emocional y mental“.

La psicóloga Alvarez nos platicó que, en su experiencia, es común observar cómo muchas mujeres luchan contra lo que les enseñaron acerca de la maternidad; por ejemplo el mito de la supermamá que no se queja, no se cansa y todo lo puede. No obstante, pronto se dan cuenta que es imposible sostener ese mito en su vida diaria.

Cómo el factor social desencadena el burnout materno

Asimismo, muchas mujeres experimentan la culpa materna en lo que respecta al tiempo que dedican a su trabajo o por tener metas y proyectos más allá de la maternidad. Esto es en gran medida porque continuamente reciben críticas por no estar para sus hijos todo el tiempo.

De tal modo, la experta señala que las expectativas irreales, la opinión crítica de la sociedad y otros factores sociales pueden influir de manera importante en la aparición del burnout materno.

“El síndrome del burnout materno aparece porque las mamas no suelen expresar sus necesidades al sentirse criticadas, juzgadas o devaluadas, sólo por expresar su malestar físico y emocional. Además, dejan atrás sus necesidades y no sienten que puedan pedir apoyo para delegar tareas”.

Alvarez remarca que ideas como que “una buena mama nunca debe quejarse” son muy dañinas para las mujeres y les impiden tener una maternidad feliz. Por ello, señala la importancia de la terapia para darse cuenta de que estas ideas son solo mitos, de que no existe sólo la madre sacrificada o la madre egoísta, no todo es blanco o negro, sino que es necesario ver todos los matices.

Como señala la psicóloga, el que una mujer se diga a sí misma “Yo soy importante” no significa que sus hijos dejen de ser una prioridad. Si bien los hijos adquieren una importancia como ninguna otra en la vida de una mamá, no por eso esta debe dejar de lado toda su vida personal.

“Si yo no estoy bien, no podré generar un vínculo emocional sano con mis hijos. El tiempo que invierto en mí, en recuperarme y darme espacios para sostener mi salud mental y física son la base para estar bien con mis hijos”.

Como dicen por ahí “no se puede dar lo que no se tiene”, por eso, no puede existir una maternidad feliz, consciente y saludable si la madre no se siente bien consigo misma.

¿Cómo afecta el burnout materno a los hijos?

Como sabemos, el burnout materno es un estado de agotamiento extremo que experimentan algunas mamás debido a las exigencias de la crianza. A diferencia del estrés cotidiano, este síndrome implica una sensación profunda de cansancio, despersonalización y una percepción de ineficacia en el rol maternal.

Uno de los síntomas más preocupantes que pueden experimentar las mujeres con burnout materno es la falta de conexión con sus hijos. Esto es porque, como señala un estudio publicado en la revista Pediatrics, el vínculo emocional con los padres es crucial para el desarrollo de la salud mental infantil, abarcando aspectos emocionales y cognitivos.

Por esto, como explica la psicóloga Alvarez, “la falta de conexión afectiva con la mamá puede generar un sensación de rechazo o abandono en el niño”. Esto puede causar generar inseguridad emocional, problemas de conducta, dificultad para establecer vínculos saludables en otros entornos como la escuela, etc.

En tanto, la dinámica familiar también puede verse muy afectada, así como la relación de pareja, sobre todo por la falta de comunicación, que provoca muchos conflictos, así como la escasa o nula intimidad sexual y desconexión emocional.

“Existe un componente grande de resentimiento hacia la pareja por parte de la persona que sufre el agotamiento, pues esta se siente enojada constantemente por no recibir apoyo”

Por esto es muy importante que las personas cuenten con el apoyo de su pareja y que esta comparta activamente la crianza y las tareas del hogar, dando espacio y validación emocional a la persona que sufre el burnout materno.

En caso de no tener pareja, es importante que las madres cuenten con diversas redes de apoyo, ya sean familiares o comunitarias, para que sepan que no están solas y que cuentan con un espacio seguro para desahogarse.

Cómo tener una maternidad feliz y saludable

Para lograr una maternidad feliz, es fundamental cuidar de nosotras mismas. El burnout materno es una realidad que afecta a muchas madres, especialmente cuando intentan cumplir con expectativas irreales. Aquí te dejamos algunos consejos para prevenir el agotamiento:

• Deja atrás los mitos de la maternidad

Uno de los mayores obstáculos para una maternidad feliz son los mitos que rodean esta etapa. Frases como “las buenas madres no se cansan” o “debes hacerlo todo por tus hijos” solo generan culpa y frustración. La realidad es que se puede ser una buena madre y, al mismo tiempo…

• Priorizar momentos descanso 
• Disfrutar actividades propias fuera de la maternidad
• Delegar responsabilidades compartiendo tareas del hogar y crianza
• Establecer limites y decir “NO” sin culpa 
• Buscar apoyo profesional y asistir a terapia cuando sea necesario

• Establece prioridades

No puedes hacerlo todo, y no tienes por qué intentarlo. Identifica qué es lo más importante para ti y tu familia, y deja ir aquello que no es esencial. Por ejemplo, si cocinar una cena elaborada todos los días te estresa, opta por comidas sencillas y nutritivas.

• Cuida tu salud mental

La maternidad puede ser emocionalmente demandante. Busca espacios para ti, ya sea leyendo un libro, practicando yoga o simplemente tomando una siesta. Si sientes que el estrés o la ansiedad son abrumadores, no dudes en buscar apoyo profesional.

• Fomenta la corresponsabilidad

La crianza no es una tarea exclusiva de las madres. Involucra a tu pareja, familiares o amigos en el cuidado de los niños. La corresponsabilidad no solo aligera la carga, sino que también fortalece los vínculos familiares.

• Busca tu propio estilo de crianza

“Muchas mamás de hoy en día son más conscientes del dolor y las deficiencias emocionales que tuvieron en su crianza, por eso no quieren repetir los mismos errores”, señala Diana Alvarez. Atreverse a cuestionar la crianza y buscar nuevas formas y herramientas para ejercerla es un gran paso hacia una maternidad feliz.

Cómo prevenir el burnout materno

En palabras de nuestra experta, Diana Alvarez, como sociedad debemos recordar que la maternidad tiene un impacto directo en la crianza y desarrollo físico, mental y emocional de los niños. Por esta razón, que una madre no pueda conectar con sus hijos debe ser un tema de interés para toda la sociedad.

Algunos pasos para garantizar una maternidad más feliz para las mujeres son promover políticas púbicas que beneficien a las madres, como mayor acceso a la licencia de maternidad, guarderías y una cultura que fomente la crianza compartida y luche contra los estigmas y mitos que existen en torno a la maternidad.

“Pedir ayuda no es debilidad, reconocer que no somos todopoderosas, ni comprar el mito de la ‘super mujer’ que todo lo puede es el primer paso para luchar contra el burnout materno. Además, se deben crear redes de apoyo y espacios en donde las madres puedan ser escuchadas, validadas y orientadas en su maternidad”.

Una maternidad feliz no tiene que ser perfecta. Al dejar atrás las expectativas irreales y enfocarte en lo que realmente importa, puedes disfrutar plenamente de esta etapa. Recuerda, no estás sola en este camino. Juntas y juntos, podemos construir una crianza positiva y llena de alegría.

¡Te invitamos a ser parte de nuestra comunidad en Facebook, Instagram o X! Si te gustó este artículo, compártelo con otras madres y padres que puedan necesitarlo. 🌟