Dormir es uno de los placeres más importantes de la vida, todos los seres vivos requerimos descanso para que nuestros organismos se depuren y recarguen energía para un nuevo día. Llevar una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y tener las horas correctas de sueño son los pilares de una vida saludable, de ahí la importancia de saber cuánto debe dormir un niño entre los 5 y los 8 años de edad.
Dormir lo que tu cuerpo necesita es básico para tu salud y bienestar, y esto es igual para todos, no importa si se trata de un bebé, de un adolescente o de un adulto mayor; claro que, dependiendo de la edad, cada persona necesita un determinado número de horas para que el sueño cumpla su objetivo.
¿Cuánto debe dormir un niño?
Tratándose de los pequeños, la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño (AASM, por sus siglas en inglés), recomienda que los niños de entre 3 y 5 años duerman de 10 a 13 horas, incluidas las siestas. Para los chicos de los 6 a los 12 años lo idóneo es dormir de 9 a 12 horas. ¡Quién fuera niño!
Ahora bien, si eres un padre que trabaja y llega por la noche a casa, trata de hacer una conciliación entre tus horarios y la hora en que tus hijos vayan a la cama, quizá si lo recorres 30 minutos para que puedan estar juntos, platicar sobre las actividades del día, leer juntos o quizá jugar un poco valga la pena, ¿no lo crees? Por supuesto que ese tiempo que tu peque se mantendrá despierto habrás de compensarlo con una siesta vespertina, así su tiempo de sueño no se verá afectado.
Consejos para antes de dormir
Para todos es muy importante tener una rutina de preparación para ir a la cama, es la forma en que le anuncias a tu cerebro que la hora de descansar se está acercando. Para los niños esta rutina es fundamental para construir y aprender un hábito que lo acompañará durante toda su vida. Tener una hora establecida para dormir también es muy saludable, pues mantiene tu cuerpo a tiempo. Ayúdale a tu niño a saber cuánto debe dormir.
La AASM da las siguientes recomendaciones para los niños:
- Apagar todos los dispositivos electrónicos 1 hora antes de acostarse.
- Tomar un baño tibio y cepillarse los dientes.
- Leer un libro o cantar una canción.
- Apagar las luces a la hora de dormir.
Trastornos del sueño
Los niños pueden presentar trastornos de sueño, que no deben confundirse con problemas en sí, cuando se habla de problemas del sueño en niños más bien se hace referencia a esos patrones de sueño que no son satisfactorios para los papás, el mismo niño o el entorno, en cambio, el trastorno es una alteración real y no una variación, del sueño.
Cualquier interrupción anormal del sueño se llama parasomnia y es común en niños en edad escolar. Suele aparecer en la primera mitad de la noche, en la fase más profunda del sueño. Casi siempre desaparece con la edad, sin necesidad de tratamiento y los expertos mencionan que entre los trastornos más comunes del sueño, en la infancia, están los siguientes:
- Sonambulismo
- El niño sonámbulo se levanta de la cama y camina sin haber despertado, lo que hace puede ir desde sentarse dormido en la cama hasta caminar o correr muy agitado, además de que también puede hablar. No es recomendable despertarle, lo mejor es conducirlo suavemente de regreso a su cama hasta que se tranquilice; casi nunca se acuerdan de lo sucedido.
- Enuresis nocturna
- El nombre médico de lo que en casa se llama “mamá me hice pipí en la cama” es enuresis nocturna y no se trata de algo grave. Es una parasomnia ocasionada por la incapacidad de que el cuerpo retenga la orina por el hecho de no estar en el baño, el pequeño no controla porque está en el sueño profundo, desaparece también con la edad.
- Síndrome de piernas inquietas
- Quizá sea el más común de todos, al grado de (a veces) no ser considerado un trastorno. Se trata de una necesidad urgente de mover las piernas en situaciones de reposo. ¿Alguna vez has escuchado de un niño que patea durante la noche? ¿Tu hijo lo hace? Lo mejor es hablarlo con el pediatra, él sabrá decirte si es necesario consultar con un especialista del sueño.
- Síndromes de apnea e hipopnea durante el sueño (SAHS)
- Los SAHS son propiamente trastornos respiratorios que se producen durante el sueño. Es una obstrucción completa (apnea) o parcial (hipopnea) de la vía aérea superior ocurrida porque las partes blandas de la garganta se colapsan y se ocluyen durante el sueño. La manifestación detectable es el ronquido. Los niños con apnea tienen un sueño intranquilo, se mueven mucho y a veces adoptan posturas peculiares para poder extender su vía aérea superior. Como no todos los niños que roncan tienen este trastorno, si te inquieta algo en el sueño de tu hijo, coméntalo con su pediatra.
Entonces, ¿cuánto debe dormir un niño?
Si deseas que tu hijo tenga buena calidad de vida no basta con la alimentación balanceada, el sueño es tan importante como nutrir el cuerpo, de hecho, es una manera de nutrir al organismo al permitirle descansar, pues así se repara a sí mismo, se eliminan toxinas, se regeneran las células y, lo más importante, el cerebro descansa, lo que no significa que se desconecte sino que entra en un estado de reposo necesario.
Recuerda que ser papá de un niño en edad escolar significa cumplir con horarios y rutinas. Estás en la época de formación de hábitos indispensables para la vida de tu pequeño, es en esta etapa cuando es más necesario poner límites y contenerlo, establecer una hora de dormir y respetarla de manera estricta.
Platicarle tanto de los beneficios como de los inconvenientes de dormir de menos o dormir de más es una manera de que tu hijo aprenda acerca de la importancia de que su cuerpo descanse y si lo refuerzas explicándoselo con palabras, y sobre todo con tu ejemplo, te aseguro que no tendrás problemas cuando llegue a la adolescencia.
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