El vínculo con tus pequeños es único y especial, se construye cada día con los pequeños detalles en los que demuestras a tus traviesos lo importantes que son para ti. Te contamos cómo establecer un apego seguro con tus hijos.
El apego que desarrolles con tus peques es fundamental para su desarrollo emocional y para la relación que tengas con ellos, ya que los harás sentir amados, protegidos. Pero también es importante mantener un balance para evitar sobreprotegerlos.
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¿Qué es el apego?
En los primeros cinco años de vida, los niños desarrollan habilidades motrices, sociales, emocionales, cognitivas y del lenguaje.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna) es en esa primera infancia, de los 0 a los 5 años, que gracias al apego se construyen los aprendizajes socio emocionales que permanecen hasta que son adultos.
“El apego se define como los primeros vínculos que establece una niña o niño desde el nacimiento con su madre, padre o persona cuidadora, y que sirven de base para todas las relaciones afectivas que se establecerán durante el resto de su vida”.
El Centro de Psicología Infantil AbaTerapia nos cuenta que las experiencias de la niñez dejan una huella muy profunda, en especial en los primeros dos años de vida que es cuando más importancia toman los patrones de apego entre los peques y sus papás.
“Si esta relación está basada en la cercanía y los cuidados, son muchas las probabilidades de que la persona, al crecer, se desarrolle sanamente, mientras que, si los padres descuidan esta atención o desatienden al niño, este tiene probabilidades más altas de llegar a desarrollar alguna patología en el futuro”.
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Apego seguro, ¿qué es?
La psicóloga infantil, Ana Isabel García, nos comenta que el apego seguro es un tipo de vínculo que “refleja el lazo afectivo duradero que se establece en el espacio/tiempo entre el bebé y el cuidador”
El apego seguro está determinado por la presencia de una persona en la vida de un niño que le demuestra que está atento a sus necesidades, se muestra sensible, empático y favorece el desarrollo de emociones.
La psicóloga nos cuenta que las características del apego seguro son:
- Proximidad: El peque quiere estar siempre cerca de su cuidador.
- Contacto físico frecuente: Tanto papá como el hijo buscan tener contacto emocional y físico todo el tiempo.
- Mayor seguridad: El niño se siente más seguro para explorar cuando está cerca de su figura de apego: mamá, papá u otro cuidador.
- Ansiedad en la separación: Cuando el peque se separa de sus papás, el peque siente ansiedad y trata de llamar su atención.
La especialista nos cuenta que los peques que son tratados con amor y atenciones durante el primer año y medio de vida desarrollan una mejor autoestima, confianza y autonomía el resto de su vida; además, pueden gestionar mejor sus emociones.
Otro de los beneficios del apego seguro es que los niños mantienen relaciones más saludables, lo cual contribuirá a que tengan una vida plena y equilibrada.
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Pasos para fomentar un apego seguro con tus hijos
Todas las acciones que realices con tus traviesos tendrán un impacto en su desarrollo; si estableciste un apego seguro con tus peques mejorará su capacidad para aprender, sentirse seguros y adaptarse mejor a su ambiente social.
Álvaro Bilbao, psicólogo, nos comparte los siguientes pasos para fomentar un apego seguro con tus hijos.
Atiende sus necesidades primarias
Facilítale el alimento, ayúdalo a dormir, hazlo sentir que está a salvo en tus brazos; estas acciones pueden parecer pequeñas pero tienen un gran impacto en tus peques. Desde bebés percibirán que pueden contar contigo.
Ayúdale a calmarse
Como adulto, a veces te sobrepasan tus emociones, ahora imagina qué pasa con un bebé que está aprendiendo sobre su mundo exterior y lo que siente.
“Una necesidad emocional básica del bebé es saber que cuando no pueda calmarse solo, habrá alguien a su lado ayudándole a reencontrar la calma”.
Muchos abrazos y besos
A través del contacto físico, los masajes, los juegos y las bromas les demuestras a tus traviesos que son importantes para ti. El contacto visual también es muy importante, cuando lo cargues, le hables o tengas cualquier interacción míralo a los ojos, esto hará que se sienta atendido.
Muéstrate tranquilo
Cuando lo cargues, alimentes o te pidan algo, responde de manera tranquila ya que ello le hará sentirse seguro. La seguridad es clave para la construcción del apego.
Déjalo explorar
Darle tiempo y espacio a tu hijo para que explore su entorno le dará confianza en sí mismo además sabrá que tú confías en él para que aprenda. Mantente pendiente para que lo ayudes si te necesita, pero sin invadir su espacio.
Dile que lo extrañas
Si por cualquier motivo tuviste que salir, cuando regreses dile a tu peque lo mucho que lo extrañaste, valida su sentimiento de tristeza por no estar juntos. Cuando llegues salúdalo de forma especial.
Sé empático
Entender las emociones de tu pequeño fortalecerá su autoestima, lo hará sentir que le importas y que te interesa todo lo que le pase.
Acepta a tu peque tal como es
Evita las comparaciones y las etiquetas, demuéstrale que lo amas porque es único y aunque puede llegar a cometer errores, sabes que aprenderá de ellos y lo hará mejor la próxima.
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Establece normas y límites
Sé claro cuando pongas límites, sé firme, pero no le grites. Explícale porqué no debe hacer determinada acción. Y cuando le hagas una observación establece contacto visual y agáchate a su altura, así el niño se sentirá comprendido.
Los primeros años de vida de tus traviesos son muy importantes, cada acción cuenta. Demuéstrale siempre lo mucho que lo amas y lo especial que es para ti.
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