No binario, pansexual, asexual… ¿Y si mi hij@?

¿Qué efecto tendrá tu respuesta en la salud mental y el bienestar de tu peque? ¿Qué necesita escuchar? Si como adulto pudieras tener sentimientos encontrados, imagina cómo podría sentirse un infante o un adolescente, perdido en un mundo de sensaciones y de términos como no binario, pansexual, asexual… ¿Ha pasado por tu cabeza la duda? Y si mi hij@…

Recientemente la famosa actriz y cantante Jennifer López presentó a su hij@ Emme utilizando pronombres neutros como they/them que podríamos traducir como “elle”, siendo muy respetuosa del modo en que su adolescente se identifica. Este es un claro ejemplo de evolución, de empatía y de respeto que, visto desde cualquier punto es admirable.

Quizá lo que más pueda preocupar a un peque sea, más allá del cómo decirle a sus padres, el hecho de llegar a sentirse rechazados o, incluso, poder perder el cariño de estos. Incluso cuando los padres son comprensivos, salir del clóset puede ser una fuente de estrés y ansiedad intensos.

 “Lo más importante es brindar apoyo”, dice Paul Mitrani, psiquiatra de niños y adolescentes del Child Mind Institute.

“Cuando las personas se sienten amadas y apoyadas, son más capaces. Tienen mayor resiliencia”.

MD Paul Mitrani, psiquiatra

Cómo ser solidario

Los padres pueden sentir miedo al descubrir que su hijo se identifica como no binario, pansexual, asexual o cualquiera de las letras LGBTTTIQA. Esto podría deberse a que les preocupa cómo le irá a su peque en la comunidad:

• ¿Será intimidado en la escuela o discriminado en el lugar de trabajo?
• ¿O será menospreciado por los que tienen sus reservas religiosas?

Con los niños, especialmente los adolescentes, es fundamental mantener abierta la comunicación; tu mensaje podría ser:

• Me alegro de que me lo hayas dicho.
• Ayúdame a entender lo que está pasando.

Es preferible no cerrarte o pretender que no pasa nada. Asegúrate de que tu peque sepa que lo amas y que estás ahí sin importar nada. Cada vez que hablen recuérdale que te hace feliz que puedan hablar de cualquier cosa porque quieres asegurarte de que estás bien, a salvo y de que reciba apoyo si cree necesitarlo.

Mantenerles seguros

Como padre, es posible que te preocupes por cómo tratarán a tu hijo en la escuela, el club deportivo o en entornos donde podría encontrar hostilidad al asumirse como no binario, pansexual, asexual o cualquiera de las letras LGBTTTIQA. Abre la conversación explorando si tu peque está preocupado por no ser aceptado o porque podría ser objeto de acoso.

Si defiendes a tu hij@ y hablas con orgullo sobre su identidad, estarás trabajando para hacer del mundo un lugar mejor no solo para tu peque, sino para los que vienen detrás y que se definirán como no binarios, pansexuales, asexuales, etc.

Decirles a otros miembros de la familia

Salir del famoso armario puede ser un gran alivio para quien se identifica como no binario, pansexual, asexual o cualquiera de las letras LGBTTTIQA, pero el proceso suele ser difícil y, a veces, doloroso. Es posible que tu hij@ pueda estar preocupado por cómo reaccionarán los miembros de la familia u otras personas importantes.

Una vez que tu peque parezca estar listo para hablar, pregúntale cómo se siente y cómo puedes brindarle apoyo. Comienza por hacer preguntas y escuchar sus respuestas con calma. El objetivo es hacerle saber que estás escuchando lo que necesita compartir.

Trata de no ofenderte si descubres que tu hijo ha sido más sincero con sus amigos o con otros adultos. El Estudio de Salud Mental de Jóvenes LGBTQ del Proyecto Trevor encontró que la mayoría de los encuestados revelan su orientación sexual e identidad de género primero a sus amigos, luego a adultos de confianza. Algunas razones por las que podrían ser reacios a decírselo a los padres son:

• A diferencia de los amigos, los padres tienen control sobre aspectos de la vida de los jóvenes, incluida la vivienda y el apoyo financiero, que se pueden retirar.
• Las expectativas de los padres sobre quiénes deberían o podrían ser mientras crecían pueden crear mucha presión para los niños. Salir del armario puede poner al niño en riesgo de sentir que ha decepcionado a sus padres.
• Los compañeros pueden tener un enfoque afín a la orientación sexual y la identidad de género, lo que los hace más propensos a aceptar y apoyar a la comunidad LGBTQ.

Cuando se trata de decirle a otros miembros de la familia que tu hij@ es no binario, pansexual, asexual o cualquiera de las letras LGBTTTIQ se recomienda que dejes que el peque tome la iniciativa. Decirle al resto de la familia depende de la persona que “sale del clóset”; es tu peque quien tendrá idea de cómo quiere proceder. Tengan una conversación abierta, honesta, clara y comprensiva para ayudarle a planificar cómo avanzar. Respetar sus deseos es un elemento muy importante en dicha conversación.

Siempre está el recurso de pedir apoyo psicológico para enfrentar al resto de la familia, sin embargo, nada como que tu peque se sincere con papá y mamá y que sean ustedes mismos quienes le apoyen en sus decisiones.

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