Uno de los retos más grandes como papás es ayudar a los peques a ser felices, respetar a los demás e inculcarles valores de forma positiva, sin recurrir a los gritos o actitudes que los puedan dañar. Te contamos cómo enseñar límites a los niños.
A veces los adultos piensan que los gritos son la mejor forma de disciplinar a los niños, ya sea porque el estrés diario te hace perder la paciencia o porque crees que sólo así te entenderán tus hijos recurres a gritar para decirles lo que no deben hacer, pero hay otras formas de comunicarse con los traviesos sin gritar.
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¿Qué son los límites para los niños?
Como en muchos temas de crianza, hay muchas opiniones respecto a los límites. Algunos padres piensan que son fundamentales para la crianza, otros no están de acuerdo con ellos y temen ser “autoritarios” si los marcan a sus hijos.
No hay respuestas correctas o incorrectas, lo importante es encontrar un punto medio con el que ayudemos a los peques a ser felices. Alberto Soler, psicólogo infantil, nos comenta que a veces los padres evaden la palabra límites porque la asocian con conceptos como “represión” o “maltrato”, sin embargo son necesarios para su desarrollo.
“Los límites no los establecen los padres, son establecidos por el medio en el que tus hijos se van a desarrollar y los niños los van a ir descubriendo conforme crezcan. La misión de los adultos y de los papás es acompañarlos en ese proceso y guiarlos para que descubran cuáles son esos límites”.
Xóchitl González Muñoz, psicóloga especializada en terapia infantil, nos explica que los límites tienen que ver con el final de algo o con “hasta aquí es conveniente”; en cuanto a los niños, los límites se refieren a hasta dónde puede llegar, qué tienen permitido hacer y qué no, pero también le dan contención, seguridad y protección al peque para enfrentarse al mundo.
“Establecer límites y mantener la disciplina no es sinónimo de autoritarismo. No se trata solo de castigar al niño para que haga lo que los adultos quieren, sino que abarcan muchos otros aspectos, ya que se crean capacidades o habilidades respetando sus características individuales; además se fomentan valores como el respeto, la tolerancia y la responsabilidad”.
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Importancia de los límites en los niños
De acuerdo con el método Montessori los límites son necesarios y además dan seguridad al niño. Deben ser pocos pero muy claros y se basan en los siguientes pilares:
- Respeto hacia uno mismo: No hacerse daño ni dejar que lo hagan a los demás.
- Respeto a los demás: No pegar, morder, tirar del pelo, insultar.
- Respeto al ambiente: Se trata de no romper cosas, no pisar hormigas, no arrancar hojas a las plantas, no maltratar a los animales, entre otras acciones que tengan que ver con respetar a los seres vivos.
Miriam Escacena, guía de crianza en el método Montessori, nos dice que establecer límites y normas permite que los peques se sientan seguros y protegidos porque saben con quién puede contar para que le guíe en su aprendizaje.
Los límites, nos detalla, también aportan a los niños seguridad emocional, porque lo nuevo desconcierta y los límites guían su conducta porque les ayudan a aprender cuáles son las conductas adecuadas de acuerdo al contexto en el que se desarrollan”.
“Los padres que informan claramente a sus hijos de cómo hacer las cosas, y de hasta dónde pueden llegar convierten su vida en algo predecible, y como consecuencia les dan seguridad. Los niños que se rigen por normas justas saben lo que ocurre cuando no las cumplen”.
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Enseñar límites a los niños, ¿misión imposible?
Gaby González, cocreadora del método de la Paternidad Efectiva, nos cuenta que la comunicación es muy importante para para establecer con éxito los límites y las normas, por lo que es necesario que los papás se expresen con claridad los mensajes a sus hijos.
Lo que para los papás, nos dice, significa “disciplina” los peques lo pueden tomar como “no soy suficiente”, “todo lo hago mal” “mis papás no me quieren”.
“Estoy segura de que este no es el mensaje que quieres enviar a tus hijos. Ahora, tranquila que esto puede mejorar, puedes educar a tus hijos, sin tener que ejercer violencia sobre ellos. ¡Tú eres el adulto! Puedes explicarles, poner límites y ritmos, sin necesidad de regañar, castigar o pegar””.
Gaby González nos explica que el hecho de no ejercer violencia contra tus hijos no es sinónimo de permisividad, libertinaje ni fin del mundo. Sino que “educar y criar a nuestros hijos desde el amor toma tiempo, paciencia y mucho esfuerzo. No es nada fácil, es un trabajo diario y una decisión que se toma todos los días; pero el resultado será increíble”.
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Consejos para enseñar límites a los niños
Laura Ruiz MItjana, psicóloga especializada en infancia y adolescencia, nos comenta que para enseñar límites a los niños es necesario ser claros y justos; por ellos nos comparte los siguientes consejos para enseñar límites a los niños.
- Empieza por lo sencillo: Empieza por límites sencillos y ves aumentando la exigencia a medida que la madurez del niño también te lo permita.
- Sé claro: A la hora de poner límites, se claro en explicarlo y porqué no debe sobrepasarlo, de acuerdo a su edad.
- Promueve la reflexión: Intenta que tu peque entienda la razón por la que no debe realizar cierta conducta y sus consecuencias. Puedes usar juegos o cuentos para que lo entienda.
- Sé firme y coherente: Si estableces límites con los más pequeños, debes ser firme y coherente con ellos. Es decir, por un lado, deben ser límites coherentes, lógicos, que tengan un sentido. Por ejemplo: Si te asomas por las escaleras te caerás y te lastimarás.
- Ofrece opciones: De esta forma promueves un comportamiento adecuado y positivo, así los peques no sólo se concentrarán en lo que no pueden hacer; tener opciones es parte de su aprendizaje. Por ejemplo: No saltes en los sillones, mejor vamos al parque o juguemos algo juntos.
- Ayuda a corregir errores: Si tu peque pintó los sillones, dile que ahora debe limpiarlos. Así entenderá que sobrepasar los límites tiene una consecuencia, además es una forma más positiva de poner límites que sólo castigarlo.
- Establece límites justos: Los límites que establezcas con los niños deben ser justos y proporcionados. Si no lo son, corres el riesgo de generar rechazo en tu peque, o incluso confusión.
- Respeta su edad: Los límites que les enseñes a tus traviesos tienen que estar de acuerdo con la etapa de desarrollo en la que se encuentren para que los puedan entender mejor.
La crianza de tus peques es un gran reto, con paciencia y amor los ayudarás a descubrir los límites de acuerdo a su entorno.
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