Niños y niñas jugando ajedrez

Por Nayeli Rueda

Atrévanse a conocer el mundo del ajedrez y dejar de pensar que es un juego dificilísimo, que solamente es para “viejitos” o para niños genio: “el ajedrez es una actividad para hombres y mujeres que se puede empezar a jugar desde los tres años de edad. Además, es una actividad inclusiva, ya que también pueden jugar niños o niñas con alguna condición particular”, nos dice Roberto Ferriz Barrios, director de la Escuela Nacional de Ajedrez. 

Hay niños que desde muy pequeños aprenden viendo a sus hermanos mayores jugar o a sus papás, pero si nadie en casa lo practica y se tiene el interés, hay programas amigables y divertidos, a través de dibujos animados y de las nuevas plataformas digitales, para familiarizarse con el tablero, las piezas y los movimientos.

La belleza del ajedrez, la resume perfectamente Ferriz Barrios: “es más que un juego o un deporte, es una filosofía de vida. Se trata de una herramienta que apoya el desarrollo de habilidades cognitivas, emocionales y sociales, además del intelecto, pues se generan conexiones neuronales durante su práctica. 

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Disciplina a través del ajedrez

Con el ajedrez, los pequeños comenzarán a tomar decisiones y tener autonomía. “Esto les permitirá ir tomando conciencia de las acciones que llevan a cabo en el tablero y, más tarde, en su vida”, señala el experto.

El juego permite reconocer que a veces nos equivocamos y tomamos decisiones erróneas y, a partir de eso, podemos crecer y madurar como personas, además de aprender de la derrota: “si quieres ser campeón, tienes que haber perdido unas trescientas o quinientas partidas”, apunta el ajedrecista. 

Este juego también enseña valores y límites: saber que hay reglas en el juego, así como en la vida, les ayudará al desarrollo personal. Además, les dará estructura y les permitirá socializar.

“El ajedrez es considerado una de las disciplinas más completas, pues abarca cuatro terrenos: el deporte, el arte, el juego y la ciencia”, señala la Dirección General del Deporte Universitario, de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Más beneficios

El ajedrez es un deporte competitivo y, como juego, resulta divertido, señala la Dirección General del Deporte Universitario. Al practicarlo, se realiza constantemente ejercicio mental, pero también es apreciado como arte, ya que potencia la creatividad de sus jugadores. Por si fuera poco, posee características de estudio técnico que tienen que ver con la ciencia. Además, es el único juego donde no interviene el azar.

Los juegos de inteligencia, como el ajedrez, mejoran: 

• Adaptación a los cambios.
• Toma de decisiones.
• Mayor periodo de atención, concentración y comprensión.
• Razonamiento lógico.
• Capacidad de abstracción, análisis y síntesis.
• Capacidad de discriminar.
• Agilidad mental.
• Capacidad de percepción.

La Escuela Nacional de Ajedrez creó el concepto “Ludea”, que es la ciencia de los juegos de inteligencia, así que además del ajedrez enseñan otros juegos en donde impera la matemática y no el azar, como el Xiang Qi, Hepte, Awele, Mancala, Damas Chinas, Gomoku, entre otros.

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