Como adultos, a veces, es difícil no estallar cuando sientes que ya no puedes más con alguna situación. Hay días en los que no sabes si estás triste, enojado, desmotivado o una combinación de todas, identificar lo que sentimos no es sencillo; aprender sobre ello desde temprana edad es muy importante. Estos consejos para enseñar a los niños a manejar sus emociones te serán de gran ayuda.
Conocer tus sentimientos te ayuda a gestionarlos. Siempre te enfrentarás a situaciones que te rebasen y te hagan sentir que no puedes más. Identificar tus emociones te permitirá expresarte sin que estalles. Si desde pequeños ayudas a tus traviesos a conocer sus emociones, podrán manejarlas de mejor manera.
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Todos sentimos enojo, tristeza, alegría, en ocasiones nos cuesta trabajo identificar lo que sentimos o porqué nos sentimos de tal manera. El Centro de Psicología Infantil de Madrid nos explica que las emociones son “reacciones afectivas intensas” a un impulso, una condición psicológica y biológica.
Es decir, se trata de una respuesta a ciertos estímulos internos o externos. Como papás puede ser complicado hablar de las emociones a los peques, esta institución nos explica que una forma de hablar de las emociones con los niños es decirles que se trata de “algo” que ellos sienten. Las emociones no se ven nñi se tocan y pueden llegar de forma inesperada.
El Centro de Pedagogía MIA Emociones Positivas te aconseja que para empezar a hablar de las emociones con tus traviesos comiences con explicarle que el mundo de las emociones es muy amplia y que cada una emoción cumple una función muy importante; así entenderán el porqué de su presencia y la importancia de su existencia.
“Puedes comenzar compartiéndoles experiencias concretas de cómo los ayudan diariamente; por ejemplo, puedes explicarles que el miedo suele entregarnos señales de alerta ante un eventual peligro, la tristeza puede avisarnos cuando extrañamos a alguien y el enojo está para advertirnos cuando algo no nos agrada”.
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Carlos Pimentel, neurólogo pediatra, nos explica que poner nombre a las emociones posibilita que los niños empiecen a identificarlas y por tanto, a integrarlas y entenderlas. Además, el hecho de incorporarlas en su imaginario, les facilitará empezar a expresar cuando las oigan. Todo ello ofrecerá un orden mental a todo lo que experimentan.
El especialista nos comenta que es importante que tus peques se sientan apoyados en la emoción que siente; que se sientan libres para experimentar ciertas emociones, ya que no hay emociones “correctas o incorrectas”; hablamos más bien de maneras apropiadas o inapropiadas de expresarlas.
“En momentos de tensión, es importante que valides las emociones de tu pque, si se siente frustrado o enfadado; es decir, debemos comunicarle que es normal que se sienta así, pero que la manera de expresarlo no es la adecuada”.
El neurólogo pediatra nos dice que otra manera de enseñar a los peques sobre las emociones es normalizarlas al nombrarlas. Hablar de cuando estamos cansados, tristes, felices o enojados. Es especialista nos explica que nos han enseñado que las emociones son malas o que es malo mostrarlas, por ello evitamos hablar de ellas, pero si lo haces, tus traviesos sabrán que pueden expresar cualquier tipo de sentimiento.
“Esto les puede ayudar a expresar con más facilidad como se sienten. Podemos buscar un momento al día (y un espacio) para hablar de cómo estamos, de cómo nos sentimos y de cómo ha ido el día (por ejemplo a la hora de la cena)”.
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Catalina Rodríguez, coach emocional, nos cuenta que para los niños las emociones son algo abstracto, por lo que requieren una representación, como colores y formas para poderlas identificar y comprender. Los niños, nos explica, tienen un conocimiento innato. Por naturaleza experimentan sensaciones y sentimientos y algunas veces perciben cómo están los otros.
“Un ejemplo es cuando observamos cómo un niño abraza a un ser significativo cuando detecta que se encuentra triste. En este ejemplo podemos resaltar que, ante la emoción básica de tristeza de alguien cercano, se produce una emoción en el niño. Esta le lleva a una reacción y en consecuencia a una acción”.
Daniela Barzallo, psicóloga infantil, nos comparte estos consejos para ayudar a los niños a manejar sus emociones.
Deja que tu peque sienta y exprese sus emociones, a veces, los adultos tratamos de evadir esos momentos en los que los niños se muestran enojados o tristes. Dejarlos sentir esas emociones los ayudará a identificarlas y gestionarlas. Las emociones deben expresarse, no reprimirse.
Cuando tu hijo muestre alguna emoción, ayúdale a reconocer lo que siente: enojo, tristeza, miedo, alegría.
Ayuda a tu peque a identificar el motivo que lo hace sentir esa emoción, así podrán encontrar juntos una solución. Ya sea que tenga hambre, sueño o algo lo moleste.
Cuando tu hijo manifieste alguna emoción ayuda a expresarla. Recuerda que tu peque no sabe expresar sus emociones, por ello tú debes guiarlo.
Presenta a tu travieso opciones, no le digas: “No llores, o no te enojes”. En su lugar muéstrale opciones, así se dará cuenta que lo comprendes y se sentirá escuchado.
Por ejemplo, si tu peque hace berrinche porque no se quiere poner la piyama, dile qué cual le gusta, así tu hijo aprenderá a proyectar sus emociones y a autoregularse.
Echar mano de herramientas como cuentos, juegos o actividades le ayudarán a entender sobre sus emociones y su causa, de esta forma podrán regularlas de mejor manera porque sabrán que es normal sentirlas y que no tiene nada de malo expresarlas.
Si tu peque hace algún berrinche o está triste, hazle saber que lo entiendes y que comprendes lo que está sintiendo, de esta manera le demostrarás que sus emociones son importantes.
Si tu travieso se muestra triste o enojado, escucha lo que te cuenta y haz preguntas sobre lo que te platica, así se sentirá escuchado y sabrá que puede contar contigo.
Para los niños pequeños es complicado expresarse con palabras, los dibujos son una herramienta muy valiosa para saber lo que tu peque piensa. Anímalo a dibujar y a que te cuente sobre sus dibujos.
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Los niños aprenden de lo que ven, si tu explotas cuando estás enojado, ellos también lo harán. Recuerda que papá y mamá son los ejemplos más grandes de los traviesos, todo lo que vean en casa lo replicarán.
Aprender sobre las emociones y cómo nos hacen sentir es muy importante para el desarrollo de los peques, es un aprendizaje que les será de mucha utilidad a lo largo de su vida.
Cuéntanos en Facebook qué otros consejos conoces para enseñar a los niños a manejar sus emociones y cuáles aplicas con tus traviesos.
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