10 hábitos en pareja para una relación sana

Hay personas que llevan muchos, muchísimos años escribiendo la historia de sus relaciones, y otras que llevan apenas algunas líneas, pero todas con el común denominador de seguir un puñado de hábitos en pareja para fortalecerse ante cualquier desafío.

Los siguientes 10 hábitos en pareja se basan en una investigación sobre relaciones duraderas, realizada por investigadores de la Universidad de Exeter, en Inglaterra.

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Hábitos en pareja que debemos adoptar

Esto es lo que recomiendan según sus resultados:

El mayor hábito en pareja. El psicólogo Steve Stephens señala en su libro 20 (Surprisingly Simple) Rules and Tools for a Great Marriage que, ante cualquier circunstancia, es importante que ambos entiendan que la relación se debe abordar como una unidad, no como individuos. Una buena comunicación para esta primera regla es indispensable.

Las parejas que prosperan se divierten juntos, incluso con el paso de los años. No hay que olvidar las primeras semanas de relación, esas en las que una comida tenía un sabor especial o cuando una película les parecía la mejor que habían visto en la vida, solo por el hecho de compartir el momento. Tengan una cita con platillos que ustedes cocinen juntos, hagan ejercicio o tomen un caminata en la naturaleza para reducir la velocidad de la cotidianidad.

Un hábito común en las parejas duraderas es la capacidad de mirar hacia adelante: tener objetivos de vida es importante. Tener planes juntos también refuerza el trabajo en equipo, ya sea que se trate de comenzar una lista de pequeñas cosas que esperan hacer juntos o definir sus objetivos personales y compartidos en los próximos cinco años. Esto puede hacer que se sientan más unidos y comprometidos.

Anne Barlow, investigadora y profesora de derecho y política familiar en la Universidad de Exeter en Reino Unido, explica que las parejas que llevan muchos años juntos tienden a ser las más realistas: “hoy eso significa comprender que todo el mundo está al límite en este momento, ya sea física, mental o espiritualmente, por lo que debemos ser realistas y justos acerca de nuestras expectativas mutuas”. En la dinámica de pareja es totalmente normal y natural experimentar sentimientos de resentimiento, por lo que hay que hacer un esfuerzo por ser generoso y saberse perdonar el uno con el otro.

¿Hay algo que debas trabajar en tu relación? Hacerlo es una buena oportunidad para observarse y detectar los puntos débiles como individuos y como pareja.

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Según la investigación, este es otro hábito clave de las parejas sólidas. Cultivar la compasión también puede ayudar a mantener las cosas en perspectiva; recuerda que todos hacen lo mejor que pueden. Barlow, una de las investigadoras del estudio, recomienda escribir una lista de las cosas que aman del otro y compartirlas.

El tiempo que pasan juntos es una oportunidad para hacer cosas dulces el uno por el otro. Así se demuestra preocupación e interés. Estos gestos, que pueden ser tan pequeños como prepararle el café por la mañana, desempeñan un papel importante para mantener unidas a las parejas, en la salud y en la enfermedad. Un hábito en pareja que además de útil es romántico.

Las parejas en relaciones prósperas tienden a tener una comunicación abierta y honesta. Es importante comunicarse con honestidad, sobre cómo te sientes y, por supuesto, también sé receptivo a lo que te tienen que decir. Nunca asumas que sabes lo que piensa tu pareja sin antes preguntar.

La intención es algo poderoso. En el estudio, las parejas más sólidas fueron las que tenían un fuerte compromiso entre ellos y su familia. Deben demostrar su intención por superar los momentos difíciles y tomar las medidas necesarias para resolver los problemas que puedan surgir. Más que un hábito en pareja, un deber.

Las parejas que logran superar las dificultades son las que se adaptan. A veces, los cambios pueden afectar lo que tú o tu pareja necesitan; traten de permanecer abiertos a los cambios, de humor, de rutina y más.

Por último, pero no menos importante, las parejas sólidas tienen una ayuda externa. Es importante tener otras fuentes de apoyo fuera de su relación romántica. Nutrir sus otras relaciones, de amistad o familiares, también hará que la que tienen en pareja sea más rica.

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