Cuando nos convertimos en mamá, evidentemente queremos y buscamos todo el bienestar para nuestros pequeños pero, en algunas ocasiones, esas ganas de ser y darles lo mejor pueden no generar beneficios para nuestros hijos. Tipos de mamás hay muchos… ¿Tú cómo te defines?
En la actualidad, nuestros hijos están expuestos a mucha información a través de diferentes medios y hasta herramientas digitales. Estos excesos nos preocupan, nos dan miedo y desconfianza, sin embargo, al mismo tiempo sabemos que no lo podemos parar ni mantenerlos aislados.
Pero no solo es la tecnología lo que nos preocupa; es el medio ambiente con lluvias torrenciales y clima extremo, la escuela y las relaciones sociales que de ahí se desprenden, el desempeño en los deportes y actividad física, los extraños en la calle, los virus y bacterias… la lista es interminable. De ahí que nos viene esa idea de proteger a nuestros niños, pero caemos en una sobreprotección que a la larga acarrea consecuencias en el desarrollo de nuestros peques.
Todas las mamás buscamos que nuestros hijos sean perfectos y que estén alejados de problemas y peligros, pero muchas veces no dejamos que desarrollen su personalidad y tal vez no nos damos cuenta hasta que ya es demasiado tarde para enmendar errores. Por eso, esta vez te explicamos y definimos los diferentes tipos de mamá que hay, además de contarte las posibles consecuencias para tu peque.
Estas mamás complacen todos los deseos de sus hijos y además están siempre atentas y vigilantes a sus movimientos para evitar cualquier accidente o peligro. Son el tipo más común de mamás (sobreprotectoras) y se caracterizan por:
¿Consecuencias?
En resumen, estos niños crecen a la sombra de mamá, siempre obedecen y hacen todo lo que se les pide. “Guarda así tus juguetes; come despacio que te vas a atragantar; no te subas a esa silla, te vas a caer”… Estas son frases muy comunes en una mamá GPS. Al parecer no tienen ninguna importancia, pero si las repetimos constantemente e insistentemente haremos de los niños unos completos inútiles.
La característica principal de este tipo de mamá es que quiere y busca la perfección total y absoluta en todo lo que los pequeños hacen. Para lograr su objetivo, exigen que los niños:
Este tipo de mamá, devoradora de niños, no es afectiva o cariñosa con sus hijos, por lo que:
¡Es de lo más común ver a este tipo de mamá con un pedazo de sándwich, pollo, rollito de jamón o cualquier bocadillo corriendo detrás del crío! También las encontramos sentadas en el parque con el pedazo de comida en la mano para que el peque coma mientras está jugando. Este tipo de actitud hace que los niños generen ansiedad por la comida en lugar de concentrarse en cualquier otra cosa que estén haciendo.
Este tipo de mamá va abriendo y allanando el camino de sus hijos. Va controlando todo lo que los pequeños puedan encontrar a su paso para que no encuentren problemas o dificultades. Esta mamá sobreprotege a sus polluelos, soluciona y se anticipa a las decisiones de sus peques. Se obsesiona tanto por controlar todo que termina agotada y agota a toda persona que esté a su alrededor. Además:
Estas mamás crean seres que:
Esta mamá cede a todo lo que el hijo pide, quién se vuelve un pequeño tirano. Los niños crecen sin límites, no tiene paciencia y se convierten en maltratadores de los demás si no se les da lo que demandan cuando lo piden. También esta madre les ayudará a sus vástagos en todo:
Estas mamás hacen que sus hijos sean completamente dependientes de ella y no sean capaces de hacer nada. Y por su manera de relacionarse con los demás, por lo general estos pequeños son excluidos de actividades sociales y familiares.
Definitivamente la maternidad nos cambia y muchas veces las circunstancias y la falta de experiencia nos llevan a cometer errores en la crianza de los pequeños. Es posible que te hayas visto retratada en una o tal vez varias de estas categorías y estés sobreprotegiendo a tus niños. Esta no es nuestra labor como mamás, nuestra obligación es darles todas las herramientas para que ellos vayan creciendo como personas íntegras y que se vuelven autónomas y tomen el control de sus vidas poco a poco.
Y tú, ¿con qué tipo de mamá te identificas?
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