Día Mundial de la Extracción de Leche Materna: 27 de enero

Parece que ya hay un día para todo y, aunque detrás del Día Mundial de la Extracción de Leche materna hay un trasfondo comercial (también como en ya casi todo), vale la pena destacar algunas razones por las que una mamá extrae su leche.

La leche materna es el alimento por excelencia para el recién nacido, por lo menos, hasta los seis meses de edad. Para enfatizar la relevancia de procurar a todo niño ser alimentado sus primeros meses con leche materna, desde 2017 se conmemora el Día Mundial de la Extracción de Leche materna cada 27 de enero.

¿Por qué es importante el Día Mundial de la Extracción de Leche materna?

Lo que se celebra no es el acto de amamantar o de lactar sino la acción de extraer leche para su posterior consumo, independientemente de las razones que la mujer tenga para hacerlo.

Y no se trata para nada de un acto poco importante, sobre todo si recordamos las polémicas que en años recientes se han desarrollado alrededor de la lactancia, entonces, el que una mujer o una pareja se tome el tiempo y tenga la disposición suficiente para extraer, almacenar y usar su propia leche es un acto que merece ser reconocido, y en medida de lo posible, fomentado.

¿Por qué extraer leche materna?

Las razones pueden ser muy variadas y personales, a continuación, enlistaré las más comunes:

• Si el bebé ha sido prematuro y debe estar en una incubadora, quizá el equipo médico no permita que haya contacto piel con piel entre él y su mamá, y salvo que los médicos indiquen lo contrario, no puede haber nada mejor para que el pequeñito salga adelante que la leche que produzca su mamá, aunque la deba beber a través de una mamila.
• Para incrementar la producción de leche, pues a mayor estimulación, el cuerpo produce más leche; claro que no es solamente estimular, beber abundantes líquidos y llevar una dieta sana ayudan para que la producción de leche sea abundante.
• En ocasiones, los bebés simplemente no aceptan el pecho de su mamá, esto es raro, pero sí llega a pasar; en estos casos es suficiente con que ella se saque la leche y la ofrezca a su pequeño en mamila.
• Más horas de descanso para la mamá. Si entre la pareja han acordado que por las noches será la otra persona quien se haga cargo del bebé para que mamá pueda descansar, entonces ella suele extraer su leche para que pueda dormir más horas de corrido sin tener que despertar para la toma de la media noche, esta quedará cubierta con la leche que dejó lista antes de ir a descansar.
• Hora de retomar las actividades cotidianas. Si mamá trabaja o estudia y llega el momento de volver a su rutina habitual, y esto significa que estará fuera muchas horas, entonces puede sacar toda la leche posible para dejar cubiertas las tomas que sucedan en su ausencia, además, en el horario de estas podrá también extraer su leche para que la estimulación no disminuya y por tanto tampoco deje de lactar.
• El inicio de la guardería. Si se ha tomado la decisión de llevar al peque a la guardería y aún toma leche materna, quizá sea una buena idea llevar sus tomas congeladas para que se las den a la hora adecuada; esto se debe investigar en el primer acercamiento con los directivos de la institución.
• Hay mujeres (afortunadamente cada vez más) donadoras de leche materna, ellas extraen su leche para entregarla a bancos de leche materna o asociaciones que la hacen llegar a bebés que la requieren, este es sin lugar a duda un extraordinario acto de amor.

¿Cómo se extrae la leche?

Pues la verdad es que el proceso no tiene mucha ciencia ni nada que no conozcamos, se trata de aplicar un modo de succión en el pecho para que la leche salga.

Hay aparatos especialmente diseñados para eso, desde los tiraleche o sacaleches manuales, que son como una bombita de succión que funciona apretando con la mano, hasta los más modernos automatizados que funcionan sin necesidad de emplear las manos, a base de un motor, como el sostén de bombeo sin manos. Cada mamá puede emplear el que mejor se adapte a sus condiciones, lo que es fundamental es tener las condiciones de higiene adecuadas y un buen manejo de la leche para su correcto almacenamiento.

¿Cómo debe conservarse la leche materna?

Lo ideal es que consigas botellas de vidrio de calidad alimentaria con su tapa hermética, puedes encontrar en el mercado biberones con estas características, también hay bolsas de plástico especiales para almacenar leche. Si prefieres botellas de plástico elige las que son libres de BPA. Lo que se debe evitar por completo son recipientes desechables o de reúso familiar.

Almacena en dosis de acuerdo a las onzas de leche que tu bebé bebe por toma, quizá hacer pequeñas reservas de dos onzas pueda ser bueno para un caso de emergencia. Acostumbra etiquetar cada recipiente con la fecha y la hora de esa dosis, y si llevas la leche a la guardería también anota el nombre de tu hijo.

Si extraes la leche en tu trabajo o escuela, puedes conservarla en un refrigerador, siempre hasta el fondo y arriba que es donde la temperatura es más fría, si no hay entonces consigue una buena hielera, ahí puedes guardar los recipientes con el hielo suficiente hasta que llegues a tu casa.

Siempre debes usar primero la leche más antigua, es importante que sepas dos cosas:

1. La leche se expande al congelarse, por eso no debes llenar hasta el límite los envases para evitar accidentes.
2. La leche congelada o refrigerada puede cambiar ligeramente de color o de textura, esto es completamente normal.

Si tienes cualquier duda sobre cómo extraer tu leche materna, como almacenarla o dársela a tu bebé, te recomiendo que platiques con el pediatra de tu bebé o que busques expertos en todo lo que a lactancia materna se refiere.

Este 27 de enero es un buen día para hablar acerca de los muchos beneficios que la leche materna aporta a un recién nacido, de cómo lactar también ayuda a la mamá y de las ventajas que la extracción de leche materna ofrece, incluso, a bebés que la necesitan, aunque no sea de su propia madre.

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