Este 22 de marzo es el Día Mundial del Agua, una fecha establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que nos invita a reflexionar sobre las consecuencias de la contaminación de nuestro vital líquido. Estamos ante un problema muy grande, por lo que necesitamos explicar a nuestras niñas y niños cómo podemos cuidar este importante recurso.
La importancia del agua
El agua es imprescindible para la supervivencia de los seres que habitamos el planeta. Simple y sencillamente sin agua no hay vida, pero además también es fundamental para el desarrollo socioeconómico, la producción de energía y la adaptación al cambio climático.
Por desgracia, a pesar de que sabemos lo importante que es, todavía hay muchos que no entienden que es un recurso no renovable y que somos las personas las principales responsables de su contaminación.
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¿Por qué se contamina el agua?
De acuerdo con la organización Agua en México, el término contaminación se refiere “a la introducción de cualquier agente —químico, físico o biológico— cuya presencia o acumulación tiene efectos nocivos en el entorno natural, la salud y el bienestar de las personas”
El agua está contaminada cuando los agentes contaminantes repercuten de forma negativa en su calidad para el consumo, para usos posteriores o para el bienestar de los ecosistemas.
Hay muchas razones por las que el agua se contamina, estas son las principales.
- En los mares se vierten millones de toneladas de basura y desechos industriales.
- El uso de pesticidas en los campos agrícolas que se filtran a los canales subterráneos y llegan a las redes de consumo.
- Los derrames accidentales de petróleo en los océanos. Además, de las pequeñas filtraciones que acaban en el mar.
- El tráfico marítimo. Residuos procedentes de barcos pesqueros y petroleros.
- La deforestación que causa sedimentos y bacterias en el suelo.
- El aumento de la temperatura en el planeta, lo cual disminuye el oxígeno en la composición del agua.
- Aguas fecales. La Organización de las Naciones Unidas alertó que más del 80% de las aguas residuales llegan a los océanos sin depurar.
- También contaminamos agua cuando, después de ser usada en los hogares, no son correctamente limpiadas o cuando tiramos al drenaje aceite, medicamentos o basura.
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Cuáles son las consecuencias de la contaminación del agua
Podemos enumerar las siguientes:
- Desaparición de la biodiversidad y los ecosistemas acuáticos. Si no cambiamos nuestros hábitos y frenamos la emisión de contaminantes, la vida en los océanos será imposible.
- Alteración de la cadena alimentaria. Ya no tendremos peces para nuestro consumo.
- Escasez de agua
- Enfermedades
- Sin agua pueden desatarse muchos conflictos sociales, incluso guerras.
Cómo ayudamos a solucionar la contaminación del agua
- A través de la deforestación. Plantar árboles, sobre todo en la orilla de ríos y lagos para proteger el ecosistema.
- Con leyes de protección más estrictas. Exigir a las industrias que reduzcan los materiales peligrosos y desechos.
- Disminuye tu huella ecológica. Trata de evitar la quema de hidrocarburos (gasolina). Usa la bicicleta para trasladarte.
- La reducción de pesticidas y productos químicos en la agricultura.
- Elimina el uso de plásticos de un solo uso
- Infórmate y trata de que los demás también hagan consciencia.
El Día Mundial del Agua se celebra cada 22 de marzo para recordar la relevancia de este líquido esencial. Es hora de poner atención. Si bien la mayor parte de la contaminación proviene de las grandes industrias, tú puedes hacer mucho. No tires basura, ahorra agua, no la desperdicies. Recuerda: sin agua, no hay vida.
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