Con motivo de su nonagésimo tercer aniversario de nacimiento, la empresa Google ha dedicado el Doodle de hoy, 20 de junio del 2023, a la artista y escultora polaca Magdalena Abakanowicz, quien es famosa por sus obras de arte. Si abres ese buscador verás que en lugar de las famosas letras de colores hay una composición gráfica en distintos tonos de grises que hacen referencia y homenaje a la obra artística de la célebre mujer polaca, considerada por muchos una de las artistas más cosmopolitas de su país.
Antes de hablar sobre la célebre artista plástica, Magdalena Abakanowicz, quiero decirte qué es un Doodle. Se trata de una adaptación gráfica que se hace al logotipo de la empresa Google, (el buscador más usado en el mundo), para conmemorar festividades, aniversarios y las vidas de célebres artistas, pioneros y científicos. Hay quienes lo definen como un garabato, lo interesante es que cual sea la conmemoración, nunca deja de decir Google, aunque no lo parezca.
¿Quién fue Magdalena Abakanowicz?
Magdalena fue una artista muy reconocida que nació en Falenty, un pequeño pueblo de Polonia situado cerca de la ciudad de Varsovia en 1930. Desde muy pequeña se sintió atraída por el mundo del arte, por eso estudió en las Academias de Bellas Artes de Varsovia y Gdansk. Además de su importante obra artística, Magdalena Abakanowicz dedicó parte de su trayectoria a compartir sus conocimientos y experiencia a las nuevas generaciones como profesora de la Escuela de Arte de Poznam, en su país natal, desde 1965 y hasta 1990; además en 1984 fue profesora invitada en la Universidad de California, en los Estados Unidos.
Pero no creas que su vida fue siempre rodeada de obras de arte y de museos, lamentablemente Magdalena nació en una época y país ensombrecidos por los efectos de la guerra, y, por si fuera poco, de una Guerra Mundial.
El ejército alemán invadió Polonia en 1939, con este hecho dio inicio a la Segunda Guerra Mundial, y sí, Magdalena tenía apenas ¡nueve años! y ya estaba en medio de una situación que ningún ser humano debiera vivir, mucho menos los niños. Los Abakanowicz eran aristócratas, o sea una familia de las más importantes en su ciudad, esto produjo que durante la invasión se vieran en medio de muchos peligros. En 1943, un grupo de soldados alemanes entró sin permiso a su residencia disparando, una de bala lastimó el brazo de su mamá causándole graves lesiones, que hicieron necesaria una amputación. Todo lo que de niña vivió, Magdalena lo plasmó años más tarde en su obra artística.
Magdalena terminó sus estudios en la Academia de Bellas Artes de Varsovia en 1954. Allí aprendió sobre diseño textil, tejido y técnicas artesanales para impresión y diseño de fibra, todo eso le ayudó para iniciar su carrera, ella optó por trabajar con materiales textiles flexibles y manipulables pertenecientes al pasado preindustrial. Así se inició su trayectoria como artista plástica textil, o sea que hacía esculturas con distintas telas, en lugar de hacerlas con metal o piedra que es lo tradicional o común, Magdalena las hacía con lo que normalmente sirve para confeccionar ropa.
Magdalena y México
La artista trabajaba sobre todo con fibras naturales, porque estas son muy fáciles de manipular y de teñir para obtener el resultado que ella deseaba, especialmente eligió una que se llama sisal, una fibra resistente que le permitía dar rienda suelta a su creatividad. Esta preferencia hizo que Magdalena Abakanowicz estuviera unida a México (quizá sin habérselo propuesto) ya que el origen geográfico del sisal es la Península de Yucatán… en México.
Los Abakanes
De acuerdo con el MACAY (Museo de Arte Contemporáneo Ateneo de Yucatán), inicialmente, las creaciones de la artista eran inmensas piezas tejidas que estaban influenciadas tanto por la naturaleza como por su propia humanidad. Estos trabajos recibieron el nombre de Abakanes por parte de los críticos polacos, un apodo que la artista adoptaría para sus creaciones.
Magdalena quería liberarse de las limitaciones de forma convencional de ver y entender el arte, por eso recurrió a la creación de enormes esculturas que desafiaban cualquier posibilidad de clasificación. Su solución fue construir obras que fueran tan masivas que no pudieran definirse o categorizarse fácilmente. Los Abakanes, elaborados con materiales naturales y flexibles, eran tejidos potentes y sugerentes, capaces de generar movimiento a pesar de su gran volumen y peso. Y fueron su respuesta a la determinación de no ser encasillada en una corriente artística determinada.
Durante la década de 1980, la artista experimentó una transformación significativa en sus actividades artísticas, transitando hacia la fundición de piezas de bronce. Este nuevo medio imbuyó a sus esculturas de un significado renovado, conservando sus formidables e imponentes cualidades al mismo tiempo que aseguraba su longevidad. Una característica definitoria de su producción artística es el uso de figuras humanas tridimensionales.
Magdalena vivió sus últimos años en Polonia, su país de origen, en donde murió el 20 de abril de 2017.
Definitivamente el trabajo artístico de la polaca Magdalena Abakanowicz es impresionante, y además te enseña que, aunque sea difícil, teniendo la determinación para conseguirlo, cualquiera puede hacer de la peor situación (por ejemplo una Guerra Mundial) su materia prima para reconstruirse y traducir sus emociones en arte. También te enseña que puedes ser original siempre, que los límites te los pones tú mismo, y esta mujer tuvo como único límite su creatividad para interpretar el mundo y por eso el Doodle de hoy está dedicado a conmemorar su nacimiento.
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