Todos esperamos la llegada de la primavera con mucho ánimo para olvidarnos de los días fríos del invierno y tener las primeras vacaciones del año con calorcito. Y no solo eso: esta es una estación cargada de significado mitológico. Revívela una y otra vez con estos nombres para niñas inspirados en la naturaleza.
- Aurora. Su significado es evidente: “aurora” o “amanecer”. Es un nombre usado para augurar la belleza y la luminosidad del nuevo día. En la mitología romana, Aurora es la deidad que personifica el amanecer.
- Azucena. Nombre de origen árabe que se refiere a una preciosa flor de color blanco o rosa.
- Azalea. La belleza de las azaleas es única. Su origen es griego y significa ‘seco’.
- Amarilis. ¿Conoces la flor de la amarilis? ¡Es preciosa! Tanto que puedes utilizarla como nombre para tu hija. Su origen es griego y transmite un gran encanto.
- Begoña. Su significado procede del santuario que se halla en la cima de una colina que domina la ciudad de Bilbao y los pueblos cercanos. Significa «lugar sobre el cerro dominante» y su origen es vasco.
- Camelia. La elegancia de las flores de la camelia es indiscutible. Como nombre, tiene un origen latino. ¿Conoces a alguien que se llame así?
- Cintia. La flor de la cintia destaca por su color amarillo brillante. Su origen es griego y significa ‘la que viene de la montaña’.
- Flor. La cálida, bella, impredecible, espinosa y excepcional Flor. Su origen viene del latín “Florus” y quiere decir “la que hace referencia a lo floral”. Sin flores en nuestros campos el verde no sería suficiente.
- Hortensia. Este es un nombre que, aunque no es muy actual, no pierde belleza. Viene del latín y su santo es el 11 de enero.
- Jazmín. ¿Alguna vez has olido un jazmín? ¡Su aroma es único! Tanto que puede inspirarte para llamar Jasmine o Jazmín a tu bebé. Se trata de un nombre de origen persa.
- Lluvia. Se usa como advocación poética y simbólica. Las mujeres llamadas así se dice que “aman a las personas que tienen cerca, que son alegres, vivas y atraen el éxito laboral”.
- Rocío. De origen andaluz, cuyo primigenio significado latino (rosius) significa “aquella que es refrescante y juvenil como el rocío”. También significa “la que tiene gracia”.
- Rosa. Su significado es “flor rosal”. El uso de este nombre durante la Edad Media fue muy frecuente, reafirmado por la simbología de belleza y pureza atribuída a la rosa y a la Virgen María.
- Silvia. Natural de los bosques o reina de la naturaleza. Deriva del latín silva, cuyo significado era “selva”, “bosque siniestro”.
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